Una cumbre de cambio climático en la que nos jugamos nuestra salud

Y ya van 26. La vigesimosexta cumbre de cambio climático arranca en Glasgow (Reino Unido) el domingo y sobre la mesa, los negociadores de cada país tienen un reto mayúsculo: poner las reglas claras para definir qué planeta quieren y cuál es la responsabilidad de cada uno. Cada país deberá retratarse y dar cuenta de en cuánto va a contribuir a frenar el cambio climático, tanto en emisiones como en financiación.

De lo que salga de la COP26 dependerá la salud que queramos para el planeta y para nosotros, porque el cambio climático influye en nuestra salud directamente.

El papel de los periodistas será clave para que los ciudadanos conozcan qué decisiones se han tomado, qué trabas imponen algunos países y a qué se compromete cada uno. La información es esencial cuando hablamos del presente y el futuro del planeta. Y la información ambiental y, concretamente la que versa sobre cambio climático, es una de las más demandadas.

Eso es el reflejo de la preocupación social que existe sobre cambio climático. En el Eurobarómetro especial sobre cambio climático que elaboró la Comisión Europea entre marzo y abril de este año, cuando la pandemia por COVID-19 todavía seguía provocando miles de muertos, los europeos respondieron que el cambio climático es el problema más importante al que se enfrenta el mundo, y en segundo lugar estaba la propagación de enfermedades infecciosas.

Los ciudadanos somos cada vez más conscientes de lo que nos jugamos en esta emergencia climática que vivimos. Y en esa misma encuesta, más del 90% de los europeos encuestados respondió que abordar el cambio climático y las cuestiones ambientales debería ser una prioridad para mejorar la salud pública. Y es que si algo nos ha hecho reflexionar la pandemia del coronavirus es que nos somos inmunes a los problemas ambientales y que el ser humano también es naturaleza, y es vulnerable.

En la Cumbre del Clima de Glasgow se decide en qué planeta queremos vivir hoy y mañana y a qué estamos dispuestos a renunciar. Los periodistas ambientales contaremos lo que allí pasa y lo que se deja pasar. De lo que se habla y de lo que no. Lo que se acuerda y lo que no se quiere firmar. En lo que hay consenso y en lo que no. Porque en esta COP, los países y sus gobernantes se van a retratar y el mundo podrá ver qué prioridades tiene cada uno. Y para que se conozca lo que allí pasa, los periodistas somos esenciales.

Durante décadas los medios de comunicación han publicado los informes científicos sobre el cambio climático, ya no hay dudas, está aquí, lo estamos viviendo en la agricultura, los bosques, las costas. Y los periodistas lo estamos contando. Es el momento de decisiones que apuesten por el planeta y sus habitantes y no aplazarlas más. La salida de la pandemia es el momento oportuno para realizar la transición ecológica que necesitamos.

Estamos en alerta roja y los países tienen que responder. Contaremos lo que allí pasa.

 

María García de la Fuente. Presidenta de APIA