El pasado 27 de septiembre se presentó en Madrid la Fundación Energías Renovables. Esta Fundación pretende ser un interlocutor con vocación de diálogo en el debate energético, tan necesario hoy, y un vehículo que traslade a la sociedad española esa nueva visión de la energía que, en el fondo, está más ligada a la ética que a la economía, al futuro que al presente, a la urgencia que a la complacencia.

Desde la Fundación consideran que es urgente inculcar otra valoración de la energía en todos los ámbitos de la sociedad y la economía porque la actual es irracional e insostenible. La sociedad percibe la energía como un bien abundante, barato, inocuo y que podemos consumir sin límite alguno. Todo lo contrario de nuestros pésimos índices de dependencia -con todos los lastres económicos y estratégicos que conlleva-, emisiones de gases de efecto invernadero e intensidad energética. Lamentablemente, no se vincula nuestro modelo energético, nuestro uso diario de la energía, con el proceso de cambio climático ni con las catástrofes medioambientales como la que padece actualmente el Golfo de México.

Los promotores de la Fundación consideran fundamental paliar el tremendo déficit de información que existe en nuestro país sobre la energía en general y sobre las renovables, en particular, desconocimiento que puede ser propicio para perpetuar modelos insostenibles en nuestro ámbito energético.

La Fundación Renovables pretende tener una amplia base social y tiene como objetivo fundamental sensibilizar a la sociedad sobre la necesidad de llevar a cabo -y acelerar- un cambio de modelo energético con el ahorro, la eficiencia y las renovables como principios básicos.

Como dijo en el acto de presentación el presidente de la Fundación, Javier García Breva, “en España se está produciendo la primera experiencia mundial del cambio de modelo energético: las energías limpias están sacando a las convencionales”.